filosofia

jueves, 27 de junio de 2019


Filosofia politica latinoamericana


El tema de la filosofía latinoamericana presenta una duda inicial, José Gaos se ha preguntado “¿Hay razón de ser hombres de lengua española o de América para no satisfacerse con la filosofía, por ejemplo, de lengua inglesa o con la filosofía Europea sino, Asiática?1”. Sabemos que la humanidad ha desarrollado una rica tradición filosófica. Las problemáticas que han aquejado a cada época están prolijamente detalladas en una multiplicidad de textos, hoy día, canónicos. Entonces, ¿existe alguna razón para que nosotros, hombres de esta América, no nos contentemos con esta rica tradición? Parece que si, porque la historia de las ideas en Latinoamérica está marcada por un deseo constante de encontrar el camino de la propia filosofía. Si para los primeros filósofos griegos la filosofía es afán de saber, ese afán, en Latinoamérica siempre se ha presentado como la voluntad de dar respuesta nada más y nada menos, a nuestra capacidad y posibilidad de pensar. Tal es el desafío lanzado desde los primeros escritos surgidos en el continente; interrogación por una filosofía americana que se reconoce como un planteamiento desde América y para americanos, problemática que contradice histórica y temáticamente la intención de situar la filosofía como una reflexión referida a problemas universales, eternos, y en tanto que tal, no sometida a determinaciones temporales ni regionales.
2  José Vasconcelos, citado por Manfredo Kempff Mercado en HISTORIA DE LA FILOSOFÍA AMERICANA.

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Cuando se pregunta por la existencia de una filosofía americana, se hace partiendo del sentimiento de una diversidad, es la conciencia de la distinción y la diferencia, lo que guía el ejercicio teórico desde el contexto regional al plano de las ideas. Para el mexicano José Vasconcelos, subyace en esta preocupación un deseo de reconocimiento e identidad: “Bien visto y hablando con toda verdad, casi no nos reconoce el europeo ni nosotros nos reconocemos en él. Tampoco sería legítimo hablar de un retorno a lo indígena (...) por que no nos reconocemos en el indígena ni el indio nos reconoce a nosotros. La América española es de esta suerte lo nuevo por excelencia, novedad no sólo de territorio, también de alma”2.
3La duda que se presenta frente al planteamiento de Vasconcelos es acerca del carácter de la distinción, en base a qué surge este sentimiento de distinción o mejor aún, ¿cuáles son los caracteres distintivos que ofrece el pensamiento filosófico latinoamericano? Lo cual a su vez nos lleva a preguntarnos acerca de la unidad de pensamiento en nuestra región. ¿Es lícito tomar a Latinoamérica como un solo cuerpo?
3  Esto puede ser constatado desde el desarrollo que tubo el positivismo en el siglo XIX, hasta los c (...)
4  Alejandro Korn. FILOSOFÍA ARGENTINA. En obras completas. Ed. Claridad. Buenos Aires. Pág. 29.
4En primer lugar, se ha tomado a Latinoamérica como un solo cuerpo, en virtud de la similar evolución que han tenido las ideas en los distintos países. En Chile, en México, en Argentina, en Perú y en gran parte del continente, se dan los mismos períodos de desenvolvimiento filosófico. Además operan las mismas influencias con efectos análogos y se producen muy semejantes frutos intelectuales. Lo último, además, es significativo para comprender las diferencias de la reflexión latinoamericana con el pensar europeo. Si bien es cierto, las corrientes filosóficas llegan como influencias continentales –en la mayoría de los países los mismos autores y tendencias en un mismo período de tiempo3–, también, es fácil constatar, que los pensadores locales, al apropiarse de ellas, las han desarraigado de sus creadores, las han deformado hasta hacerlas irreconocibles a los ojos de sus autores. En los albores del pensamiento latinoamericano, un argentino, Alejandro Korn, ya daba cuenta de ello: “De allende los mares recibimos, en efecto, la indumentaria y la filosofía confeccionadas. Sin embargo; al artículo importado le imprimimos nuestro sello. Si a nosotros se nos escapa, no deja de sorprender al extranjero que nos visita; suele descubrirnos más rasgos propios –buenos o malos– de cuanto nosotros mismos sospechábamos”4.



El nosotros en latinoamerica



La idea fundamental de una Filosofía del nosotros, parte de la realización de lo plural-diverso, humano y social-histórico. Seria entonces, el re-encuentro del sujeto, su valoración en sí mismo en la pluralidad-diversidad y el contexto social-histórico. Aquí la idea del sujeto abstracto de concretiza en el con-vivir con lo demás en armonía con el entorno […]

La idea fundamental de una Filosofía del nosotros, parte de la realización de lo plural-diverso, humano y social-histórico.
Seria entonces, el re-encuentro del sujeto, su valoración en sí mismo en la pluralidad-diversidad y el contexto social-histórico. Aquí la idea del sujeto abstracto de concretiza en el con-vivir con lo demás en armonía con el entorno social y natural, en la configuración del nosotros, así cobra sentido la 



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Filosofía del nosotros.

Este planteamiento encuentra su mayor exposición en Roig, Arturo 2009 (1981) Teoría y crítica del pensamiento latinoamericano (Argentina: Una Ventana), con el concepto a priori antropológico, cuya extensión recoge crítica y mitológicamente los argumentos de esta Filosofía. “Se trata de una meditación en la que no solo interesa el conocimiento, sino el sujeto que conoce, el filósofo en particular, en su realidad humana e histórica” (Roig, 2009: 9)

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Esta Filosofía adquiere su verdadero valor cuando el sujeto (en plural) se afirma como valioso en sí mismo, aquí el concepto pueblo es el articulador y se redimensiona en la comprensión de la historicidad de todo ser humano, no la superioridad de uno sobre otro. Esta es una nueva vuelta al humanismo.
Esta concepción es entre otras cosas, una Filosofía transformadora – liberadora, donde se afirma el sujeto (en plural) en la plena realización del nosotros. La consigna sería “ponernos para nosotros y valer sencillamente para nosotros”, Roig sostiene que esto está en clave hegeliana, cuando el filósofo de Stuttgart, señala “la Filosofía exige un pueblo”, es decir la plena reafirmación del sujeto (en plural), esa es la transición hacia el nosotros.

La concepción del nosotros está referida a la diversidad, no la unidad ni a lo idéntico, que por extensión nos lleva al tema nacional (de identidad) o nacionalismo chauvinistas, que fue aprovechado en el terreno político por el populismo, que en el mayor de los casos encubre la diversidad del nosotros, por el nosotros de masa sin conciencia, diría Ernesto Laclau “adoración de un caudillo”. Entonces las respuestas a las preguntas por el nosotros han de encontrarse en la diversidad. En la arena política seria a la diversidad de opciones, no la de un único líder (en alemán Führer).


La tirania del yo


Vivimos bajo la tiranía del YO. Yo lo primero y por encima de todo: mi libertad, mi carrera profesional, mi éxito, mi espacio, mi tiempo, mi opinión, mi criterio….y eso necesariamente se da de tortas con la familia.
Pedro Mejías, Leonor Tamayo, Amelia Bueno y Teresa García Noblejas. /Actuall
El otro día tuve el privilegio de participar en uno de los Encuentros Familia Vida y Libertad que organiza HazteOir.org en Cádiz a cargo de Pedro Mejías, en el Puerto de Santa María.
Pedro me había invitado a presentar mi libro, ‘Mi Historia y Once Más‘ (ed. Áltera) junto con dos ponentes de excepción: Teresa García-Noblejas y Amelia Bueno. Y aunque con cierto pudor, hice lo que me pidieron y por cierto disfruté muchísimo. Hablamos ante un montón de gente: un montón de gente en la sala que estaba abarrotada y otro montón fuera en la calle abucheándonos, gritando e insultando….(en fin, cosas de la dictadura del pensamiento único).
Actuall depende del apoyo de lectores como tú para seguir defendiendo la cultura de la vida, la familia y las libertades.
El tema en el que se englobaba la presentación del libro era “La familia natural, ¿en crisis?”. Por mi parte planteé sobre todo una idea que está latente a lo largo, creo, que de todos los capítulos de “Mi Historia y Once Más”,  y es que no es la familia la que está en crisis sino las personas.
«Cuando nos dejamos dominar por la tiranía del YO, entonces la familia nos molesta, nos estorba y nos agobia porque somos incapaces de adaptarnos a ese esquema del amor desinteresado y generoso»
Vivimos bajo la tiranía del YO. Yo lo primero y por encima de todo: mi libertad, mi carrera profesional, mi éxito, mi espacio, mi tiempo, mi opinión, mi criterio….y eso necesariamente se da de tortas con la familia, porque la familia es el lugar en el que uno piensa antes en el otro que en sí mismo. En la familia lo primero es el amor que nos tenemos unos a otros, queremos que nuestro marido, nuestra esposa, nuestros hijos, nuestros padres y hermanos sean felices, y, a pesar de nuestras miserias y debilidades, lo intentamos con todas nuestras fuerzas y si nos equivocamos y fallamos, pedimos perdón.
Cuando nos dejamos dominar por la tiranía del YO, entonces la familia nos molesta, nos estorba y nos agobia porque somos incapaces de adaptarnos a ese esquema del amor desinteresado y generoso. Entonces rechazamos formar una familia o renegamos de la nuestra. Creo que de ahí vienen las crisis, la soledad y la frustración. Sólo desde el amor desinteresado se puede construir la felicidad tanto personal como en el matrimonio y la familia e incluso en la vida profesional. Y es que el que sólo se busca a sí mismo, lo único que encuentra es… ¡a sí mismo!
Y en el caso de la mujer, que a fin de cuentas es el tema del libro, todo esto ha sido convenientemente aderezado por el feminismo radical y la ideología de género. Se trata de anular esa esencia propia femenina que se caracteriza -más aún si cabe que en el hombre- por la entrega a los demás. En palabras de san Juan Pablo II: “La mujer no se encuentra a sí misma si no es dando amor a los demás”. Por eso en la familia la mujer se realiza plenamente, muy al contrario de los que las ideologías feministas nos venden.



El ensayo latinoamericano en la era contemporánea

Tras un largo período de dictaduras sangrientas, golpes de estado y problemas sociopolíticos, América Latina entra en la era contemporánea. Los estados, recién nacidos a veces, buscan una forma de autodefinirse dentro de las ideas sociales y la toma de conciencia del ser latinoamericano. Desde los primeros años de la Independencia el ensayo es el arma que utilizan los federales en su lucha contra los centralistas. Se escriben obras revolucionarias que desempeñan un papel primordial en la formación de las ideas sociales.

Así que desde el siglo XVIII tenemos ensayos que juegan un papel definitorio en la vida socio-política de América Latina. Muy conocidos son los panfletos de Antonio Nariño (1765-1823) y el Discurso preliminar a los americanos (1797) que utiliza el autor en su lucha contra Camilo Torres Tenorio (1766-1816) y en su intento de pasar sus ideas centralistas. Por otro lado, José Martí (1853-1895) en Nuestra América (1891) es el primero en entender el peligro que supone el imperialismo norteamericano y en su ensayo trata de avisar a sus compatriotas exponiendo su pensamiento antiimperialista. Cabe mencionar que Martí, el Apóstol de Cuba, es también el precursor ideológico de la Independencia cubana que supuso un gran cambio social y político para la isla.

José Carlos Mariátegui (1894-1930) con su libro Siete ensayos de interpretación de la realidad peruana (1928) es un caso diferente. La ortodoxia marxista de Mariátegui lo hace percibir a los indígenas como parte del proletariado mundial. En su obra es obvia la idea de que la sociedad andina debe cambiar, y propone la vuelta al pasado precolombino. Por otro lado, Haya de la Torre (1895-1979), (Por la emancipación de la América Latina, 1927 y Espacio-tiempo histórico, 1948) apoya que el equilibrio social puede ser adquirido dentro de la nacionalización de las tierras y el rechazo del imperialismo.

Por lo que se refiere a la toma de conciencia de la esencia del ser latinoamericano podemos destacar muchas figuras. La importancia de esta búsqueda de una identidad es obvia en José Enrique Rodó (1871-1917) y su Ariel (1900) que pone las nuevas bases para la dicotomía “civilización y barbarie”.  Ariel es una obra-testimonio “del espiritualismo americano” en la que su autor dentro de la estética de la Grecia Clásica advierte a la juventud del peligro norteamericano. Rodó aporta que los latinoamericanos deben encontrar su identidad siguiendo el ejemplo de los griegos antiguos. Pasando a los ensayistas más recientes, podemos mencionar a Pedro Henríquez Ureña (1884-1946) que dentro de su obra Seis ensayos en busca de nuestra expresión (1928) estudia el pasado y “los problemas aún no superados”. Ureña aporta que “Europa está en eclipse”[1] y América con su pasado indio tiene otras necesidades, así que encontrar una expresión cultural auténtica, a través del pasado, resulta imprescindible. Alfonso Reyes (1889-1959) con su Visión de Anáhuac (1917) y sus ideas revolucionarias y contra nacionalistas trata de descubrir y promover la esencia mexicana. El ya mencionado Mariátegui expresa sus ideas sobre la necesidad de buscar la identidad dentro del pasado incaico y de los ayllus. Piensa que las culturas precolombinas van a renovar tanto el presente cultural como la sociedad del país andino
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Cabe mencionar que Reyes ejerció gran influencia sobre dos de los más conocidos ensayistas de nuestro siglo: Carlos Fuentes (1928-2013) y Octavio Paz (1914-1998). Muchas de las obras de Paz fueron publicadas con la ayuda de Reyes[2]. Paz, en El laberinto de la soledad(1950), nos da un “análisis del carácter mexicano” y de la singularidad mexicana. Los mexicanos, según Paz, son una raza muy peculiar: son pobres, pero tienen más fiestas que los demás; la muerte es un juego para ellos, la desprecian[3]. Así que dentro de esa obra podemos profundizar en el pensamiento del pueblo mexicano y encontrar la verdadera quintaesencia del ser mexicano.



EL TRATADO FILOSOFICO EUROPEO

 ¿Qué es el tratado filosofico?

Consiste en una produccion literaria que se presenta como dearrollo y conclusion de un tema cientifico o filosofico.
Se estructura bajo compartimientos llamados apartados que sirven para exponer de una manera logica, detallada, acrítica y expositiva las torias.
El tratado es un instrumento que ha servido de exposicion de ideas de Aristoteles, pasando por la Edad Media y la Ilustracion.
Las caracteristicas del tratado filosofico son:

dogmatismo
rigurosidad
logica
pretension de validez universal y concluyente.

 EL TRATADO ARISTOTELICO
Se caracteriza por la rigurosidad de su discurso basado en principios logicos y racionales. Recurre a la ciencia de la retorica que consiste en el uso de la palabra persuasiva para convencer de la verdad ultima.
El curso del argumento es a menudo interrumpido por digresiones, a medida que surgen puntos de las dificultades o se siguen posibles objeciones y hay numerosas repeticiones, y es atacado el mismo problema desde angulo0s similares o levemente diferentes en varias ocaciones.

 EJEMPLO Y ANALISIS DEL EXTRACTO DE TRATADOS
“Si existe, pues, algún fin de nuestros actos que queramos por él mismo y los demás por él, y no elegimos todo por otra cosa -pues así se seguirá hasta el infinito, de suerte que el deseo sería vacío y vano – es evidente que ese fin será lo bueno y mejor.”[3] Con respecto a esto, Aristóteles se plantea la posibilidad de un bien por el cual todos los demás alcancen su sentido. Efectivamente, este bien por el cual elegimos todas las cosas es la felicidad: ella es quien da sentido a todo cuanto hacemos."
Como todo tratado expone la idea filosofica relacionada con la etica la cual es el principio que va ha demostrar logicamente en el desarrollo del texto. La pregunta con su respectiva respuesta denota el caracter racional y riguroso de su discurso


miércoles, 19 de junio de 2019


Tratado Filosofico



Sin duda alguna, los problemas filosóficos más fundamentales se encuentran hoy como nunca al centro de las preocupaciones del hombre actual, y ello, hasta el punto de invadir todos los campos de la cultura: la literatura (novelas, ensayos, poesía...), el teatro, el cine, la radio-televisión, e incluso la canción.
En ellos se encuentran constantemente evocados los eternos temas del pensamiento humano: el sentido de la vida y de la muerte, el sentido del bien y del mal, el fundamento de los valores, la dignidad y los derechos de la persona humana, la confrontación de las culturas y de su patrimonio espiritual, el escándalo del sufrimiento, de la injusticia, de la opresión, de la violencia, la naturaleza y las leyes del amor, el orden y el desorden en la naturaleza, los problemas relativos a la educación, a la autoridad, a la libertad, el sentido de la historia y del progreso, el misterio del más allá, y finalmente, sobre el fondo de estos problemas, Dios, su existencia, su carácter personal y su providencia.
La filosofía, aun teniendo necesidad del aporte de las ciencias experimentales, se presenta como una ciencia distinta de las otras, autónoma y de máxima importancia para el hombre, el cual siente interés no sólo por observar, describir y ordenar los varios fenómenos, sino también y sobre todo por comprender su verdadero valor y su más íntimo sentido.

 
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Etimológicamente, la palabra tratado proviene del latín Tractatus, y consiste en una producción literaria que se presenta como desarrollo y conclusión de un tema científico o  filosófico. El tratado se estructura bajo compartimientos llamados apartados que sirven para exponer de una manera lógica, detallada, acrítica y expositiva las teorías. Por su pretensión conclusiva, el tratado presenta las ideas como un sistema con validez universal y objetiva, como saber conclusivo e incuestionable. Como el tratado concluye las temáticas que desarrolla, también se lo considera como el cierre de una disputa dialéctica. Además, el tratado presenta saberes basados en una estructura lógica y solo bajo este criterio es juzgada su validez. El tratado es instrumento propio de la filosofía occidental, que ha servido de instrumento de exposición de ideas desde Aristóteles, pasando por la Edad Media y la Ilustración, hasta llegar a Ludwig Wittgenstein. En resumen, podemos decir que las características del tratado filosófico europeo son: dogmatismo, rigurosidad, lógica y pretensión de validez universal y concluyente



Hacen referencia a los diferentes eventos que son desarrollados por eso llamado la filosofía. Vamos a presentar de manera sencilla qué son y qué temas abordan cada uno de ellos:


COSMOGONÍA: conjunto de teorías míticas, religiosas, filosóficas, científicas relacionadas con el origen del universo y su estado actual; éste concepto asimiló al concepto cosmología.

METAFÍSICA: es un campo de la filosofía que se centra en el estudio de la realidad última, lo esencial. La metafísica se divide en Ontología, que analiza las clases de seres que hay o que existen en el universo y la Metafísica que se centra en describir los rasgos más generales de la realidad, esa realidad se manifiesta en planos abstractos; la ontología, en cambio, tiene más relación con el plano físico que experimenta la existencia humana. El origen de la Metafísica está en Aristóteles al intentar definir  el SER, pero el término fue realmente introducido por Andrónico de Rodas, quien clasificó las obras de Aristóteles en: libros de física y los que están luego de la física, es decir, la meta física.

ANTROPOLOGÍA: es el estudio de los seres humanos desde una perspectiva biológica, social y humanista. se divide en Antropología física que estudia la evolución y adaptación fisiológica de los seres humanos ; Antropología Social o Cultural, que analiza las formas en las que los seres humanos viven en sociedad, cómo ha evolucionado la cultura. ( cultura: todo lo que el ser humano ha elaborado y realizado a lo largo de su historia).

GNOSEOLOGÍA: campo de la filosofía que analiza la naturaleza, posibilidad y límites del conocimiento; analiza el origen del conocimiento como problema filosófico; estudia los distintos tipos de conocimiento que pueden alcanzarse y el problema de su fundamentación.

EPISTEMOLOGIA: es una rama de la filosofía que trata de los problemas que tienen relación con lo que se denomina Teoría del Conocimiento. Define los conceptos relacionados con el saber, sus fuentes, tipos de conocimiento posibles y su grado de certeza; además establece la relación entre el objeto conocido y el ser que conoce ( de aquí surgen el Empirismo y el Racionalismo como corrientes filosóficas que fundamentan el conocimiento).

AXIOLOGÍA: es la teoría de los valores, tanto de los positivos como de los negativos; considera qué es o no es valioso y le da fundamentación a los juicios que admiten esas determinaciones.
ÉTICA: es el campo filosófico que refiere a las pautas o normas de conducta humana en el ámbito social y de acuerdo a unos principios fundamentales considerados como el Bien Supremo, la Virtud, la Felicidad, el Placer, la Obligación, la Tendencia a la Perfección. Esos principios pretenden el pleno desarrollo de las potencialidades humanas. La ética ha sido confundida con la Moral, ésta se refiere a las normas o costumbres de carácter personal y que tienden a fortalecer lo bueno, diferenciarlo de lo malo y así establecer pautas de conducta individuales.

ESTÉTICA: desde la perspectiva filosófica es el estudio de lo bello, lo placentero, lo que inspira sentimientos positivos en el ser humano.
POLÍTICA: los antiguos Griegos acuñaron el término y hace referencia, en su sentido original, al arte de gobernar o dirigir la Polis o Ciudad Estado.

TEODICEA: es un campo de la filosofía que fue promovido por LEIBNIZ; fundamentalmente pretende justificar racionalmente la existencia de Dios; se le denomina también como Teología Natural que se opone a la Teología Sobrenatural, esa que explica la existencia de Dios por medio de la fe, la revelación.


En conlusion el tratado filosofico se caracteriza al tratado, es cuestionar el principio de causalidad y efecto que determina la razón. Para Hume este principio se sostiene por la creencia y la costumbre, y no por un principio racional y lógico. Primero explica que dos tipos de objeto, por ejemplo, la llama y el calor están siempre unidos porque la mente se ha acostumbrado a relacionarlos de acuerdo con su vivencia y experiencia, y se da un instinto natural que ningún razonamiento puede evitar. Entonces, según la propia lógica de su exposición filosófica, es la costumbre la que nos hace pensar que una cosa resulte de otra, como el calor de la llama, y no un principio lógico de causa-efecto.

                                   

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Filosofos Latinoamericanos


Existen filósofos latinoamericanos destacados que han contribuido de forma importante con sus teorías, reflexiones y conocimientos al mundo de la filosofía.
La actividad filosófica en América Latina se ha caracterizado históricamente por una tremenda diversidad en su enfoque de estudio y práctica. En general, los latinoamericanos han estado atentos a los desarrollos filosóficos en el resto del mundo y, a través de los años, han adoptado distintas posturas filosóficas: progresivas como conservadoras, tanto pragmáticas como idealistas, materialistas y espiritualistas.
 
 
 


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Constantemente existen intereses y proyectos en América Latina debido a la práctica activa y diversa de la filosofía, el interés popular, en ocasiones el fomento gubernamental, la conciencia cultural de lo que ocurre en otros continentes y la esperanza generalizada en la educación como la clave para el desarrollo.
La influencia filosófica europea fue crucial durante el siglo XX, debido en buena parte a la llegada de filósofos españoles exiliados tras la caída de la República. Las enseñanzas del filósofo español Ortega y Gasset, por ejemplo, fueron un elemento importante en la formación de las reflexiones filosóficas latinoamericanas.

Las corrientes filosóficas europeas se adaptaron a la realidad latinoamericana gracias a un proceso de auto-examinación (¿Qué condición del pensamiento o del ser es única a América Latina?).
Áreas de estudio filosófico como la identidad cultural, el pensamiento feminista, la filosofía de la liberación y el marxismo están muy conectadas con el pensamiento filosófico latinoamericano.

1-Sor Juana Inés de la Cruz (1651-1695)

 Pensadora mexicana, representante de la corriente humanista y primera filósofa en cuestionar la condición de la mujer dentro de la sociedad latinoamericana.

2- Andrés Bello (1781-1865)
 Filósofo y político venezolano, considerado uno de los humanistas más importantes de América Latina. Fue maestro de Simón Bolívar y tomó parte del proceso que culminaría en la independencia venezolana.

3- Juan Bautista Alberdi (1810-1884)
 Fue un intelectual, artista y filósofo argentino. Se le considera el autor intelectual de la Constitución Argentina de 1853. Fundador de la Generación del ’37, corriente intelectual adherida a la democracia liberal.

4- Justo Sierra (1848-1912)
 Intelectual mexicano, artífice de la fundación de la Universidad Nacional de México (actual Universidad Nacional Autónoma de México, UNAM).
Llamado el “Maestro de América”, título otorgado por varias universidades latinoamericanas. Uno de los pensadores más influyentes en la historia moderna de México.

5- José Martí (1854-1895)
 Escritor, pensador y filósofo cubano que lideró la Guerra de Independencia de Cuba. Su influencia fueron corrientes modernistas y liberales.

6- Francisco Romero (1891-1962)
 Inició la “generación de fundadores”, que reunió a filósofos activos alrededor de 1910 y que fueron formados en el positivismo, al que finalmente se rebelaron. Nació en Sevilla pero emigró a Argentina a temprana edad y fue ahí que realizó su obra filosófica.
Propuso en 1940 el término “normalidad filosófica” al nombrar el “ejercicio de la filosofía como función ordinaria de la cultura” en América Latina.